En sus trabajos, Heracles era a menudo acompañado por su amigo (un erómeno), según algunos Licimnio y según otros su sobrino Yolao. Aunque se suponía que sólo tenía que realizar diez trabajos, esta ayuda hizo que tuviera que sufrir dos más. Euristeo no tuvo en cuenta el trabajo de la Hidra (donde Yolao le ayudó) ni el de los establos de Augías (porque se le pagó a cambio o, según otras versiones, porque fueron los ríos quienes hicieron el trabajo), por lo que ordenó dos más, haciendo un total de doce.
El orden tradicional de los trabajos es:
Matar al león de Nemea y tomar su piel
Matar a la hidra de Lerna
Capturar a la cierva de Cerinia
Capturar al jabalí de Erimanto
Limpiar los establos de Augías en un día
Matar a los pájaros del Estínfalo
Capturar al toro de Creta
Robar las yeguas de Diomedes
Robar el cinturón de Hipólita
Robar el ganado de Gerión
Robar las manzanas del jardín de las Hespérides
Capturar en los infiernos a Cerbero
jueves, 22 de abril de 2010
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